No eres sostenible hasta que tu marca lo demuestra
Hacer las cosas bien ya no basta. Hoy en día, todas las marcas dicen preocuparse por el planeta y lo que de verdad cuenta es lo que haces, cómo lo comunicas y si eso genera confianza.
Hoy, sostenibilidad y branding van de la mano. Y en el entorno industrial B2B, eso es una gran oportunidad (o una amenaza, si lo dejas pasar).
Ya en 2023 Capgemini publicaba en un estudio que el 79% de los consumidores cambiaría de proveedor si descubre que este hace declaraciones falsas sobre sostenibilidad. Ahora, y más en B2B, la exigencia es aún mayor: se buscan socios sólidos, fiables y alineados con criterios ESG.
Del cumplimiento pasivo al liderazgo visible
Las empresas líderes no se limitan a cumplir normativas ESG. Usan esos principios como palanca estratégica.
Empresas como Jacobs no solo tienen un plan para el clima: exigen que todos sus proyectos lo integren. WSP no habla de sostenibilidad como tendencia, sino como parte de la estrategia operativa de sus clientes. En ambos casos, ESG no es una etiqueta. Es cultura, posición y ventaja.
Existen consultoras especializadas que ayudan a estructurar esa estrategia. Su enfoque es valioso no por su propia visibilidad como marca, sino porque articulan muy bien los elementos técnicos, sociales y económicos que una empresa debe tener en cuenta si quiere integrar sostenibilidad en su negocio. De ellas podemos aprender qué contar, cómo estructurarlo y dónde poner el foco para ganar autoridad.
De hecho, según un informe de McKinsey (ya en 2022), las empresas que integran sostenibilidad en su estrategia de negocio tienen un 20% más de probabilidades de superar a sus competidores en rentabilidad a medio plazo.
ESG como parte de tu propuesta de valor (real)
Cuando una empresa integra sus compromisos ESG en su propuesta de marca, no solo gana en coherencia: gana en autoridad. Porque hoy la confianza se construye con hechos, y la visibilidad con estructuras claras.
AECOM lo resume con su concepto "Sustainable Legacies". Arup conecta sus políticas ESG con los ODS y lo plasma en informes públicos. Estas marcas no solo cumplen: posicionan. Y eso las hace reconocibles.
Según el estudio global de Deloitte sobre sostenibilidad corporativa, el 73% de los ejecutivos afirma que los criterios ESG se han vuelto esenciales para acceder a grandes licitaciones, colaboraciones internacionales o fondos de inversión.
El algoritmo quiere hechos, no discursos
La nueva batalla por la visibilidad se libra en los motores de IA. Y esas máquinas no compran relatos bonitos: buscan estructura, evidencia y fiabilidad.
Tu narrativa ESG puede convertirse en una fuente de autoridad para cualquier tipo de buscador si:
- Se basa en datos contrastados.
- Está organizada de forma clara y jerárquica.
- Es coherente con tu propuesta de valor y tu identidad visual.
Según el Thomson Reuters Institute (2025), la sostenibilidad dejará de ser percibida como un “extra reputacional” y se consolidará como parte estructural de la estrategia empresarial. ESG pasará a medirse no solo como cumplimiento, sino como capacidad de anticipar riesgos materiales, atraer inversión y generar confianza en mercados cada vez más exigentes.
Esto significa que los datos ESG, cuando están bien integrados y verificados, no solo aportan transparencia: se convierten en un activo de diferenciación que eleva la autoridad de marca en entornos B2B y en motores de IA que priorizan fiabilidad y consistencia.
Cinco claves para que tu sostenibilidad se convierta en marca
- Audita tu realidad ESG: sin maquillaje. Solo hechos contrastables y documentados.
- Identifica fortalezas comunicables: energía, procesos, impacto, relación con comunidades, diversidad, gobernanza.
- Diseña una narrativa estructurada: conecta esos hechos con tu cultura, tu oferta y tu diferenciador.
- Activa esa narrativa en todos tus canales: web, propuestas comerciales, branding, formación interna, onboarding.
- Sigue actuando y mejorando: sin acciones sostenidas, todo se convierte en greenwashing.
- Tu marca es tan sostenible como parezca (y como sea)
En Ready creemos que no basta con decirlo, ni siquiera con hacerlo. Hay que hacerlo visible, estructurado y memorable. Porque si una IA no es capaz de entender que tu empresa está comprometida con la sostenibilidad, tu cliente tampoco lo hará.
Y eso, en un mercado técnico y exigente, es lo que genera tracción.
Este es el número 1 de una serie de 7 artículos sobre cómo crear una marca sólida en el ecosistema sostenible mundial en 2025. Nos comprometemos a ir modificando y actualizando los artículos según vaya cambiando el reglamento, los algoritmos... y la ciencia.
Han sido creados con el apoyo de herramientas de inteligencia artificial para localizar normativas actuales, tendencias y fuentes, y revisados por Ready para asegurar su calidad en el contexto B2B. Si detectas algún fallo, escríbenos a info@ready.es.
Consulta el resto de artículos de esta serie:
- Convierte tu cultura ESG en tu mejor estrategia de marca
- ¿Y si ya eres más sostenible de lo que te imaginas?
- Estructura para ser visible: que la IA entienda tu ESG
- Fórmulas para impactar con tu relato ESG
- Evita el greenwashing y valida correctamente tu posicionamiento ESG
- El papel del equipo en el posicionamiento sostenible
- Escalar tu marca sostenible: fases, errores y palancas para crecer con coherencia
